Decenas de cultivos ilegales de marihuana en las montañas del Cauca, en Colombia, suministran a países como Holanda o Estados Unidos
Noticias Caracol ha destapado una red de narcotráfico de grandes dimensiones protagonizado por decenas de cultivos ilegales de marihuana que bañan el paisaje de las montañas del Cauca en Colombia. Una estampa que de noche destaca por la luz de los invernaderos, da igual la orografía del terreno, en cualquier rincón o posición se puede encontrar un cultivo de cannabis. La producción de los cultivadores acaba en manos de narcotraficantes que venden el Kilogramo a 35.000 pesos a países como Holanda o Estados Unidos, entre otros.
La cadena de televisión colombiana, Caracol, ha realizado un reportaje sobre los cultivos ilegales de marihuana que destacan por doquier en las regiones próximas a las montañas del Cauca. Para los centenares de habitantes de los municipios es su forma de ganarse la vida, ya que no tienen otros recursos para subsistir, y cuya zona está siendo controlada por las guerrillas y milicianos que actúan a la vez como narcotraficantes a gran escala.
Cuando los reporteros entran en el municipio de Miranda se pueden observar pintadas que actúan a la vez como señales de que se vende marihuana, al igual que indican caminos hacia los propios cultivadores de la región. Son caminos estrechos, llenos de barro, por los cuáles cada día decenas de cultivadores de marihuana caminan para llegar a su trabajo. Es ilegal, pero allí domina el descontrol gubernamental. El propio alcalde del municipio de Miranda exige una legalización de la marihuana, del mismo modo que está sucediendo en numerosos estados americanos.
En los senderos destacan los puestos de los milicianos que controlan el territorio para evitar sorpresas inesperadas. En cada invernadero trabajan, entorno, a seis personas. Donde cada uno pueda cultivar entorno a las 200 plantas de marihuana, cuyas cosechas posteriormente son vendidas a compradores internacionales.
Los sistemas de cultivos están perfectamente organizados y no les falta de nada, allí destaca la variedad Super Skunk, la más vendida como reconoce uno de los campesinos cannábicos. Aunque popularmente allí se conoce como marihuana creppy, es decir variedades de interior para que sean capaces de sacar el máximo THC.
Los invernaderos, como se puede apreciar en las imágenes, están encendidos todas las noches sin escatimar en costes, aunque la luz es pirata, es decir que no pagan por el gasto de su uso.
La localidad de Miranda tiene un olor especial, una mezcla de pólvora y marihuana. Pero impactan las cicatrices de conflictos bélicos causados por los años más duros de las guerrillas colombianas que dominaban sin escrúpulos el territorio. Aunque hoy en día, lo siguen haciendo.
Los principales compradores de los narcotraficantes colombianos de marihuana son los Estados Unidos y Holanda, que luego lo revenden en sus países.
Las autoridades locales exigen una legalización de la marihuana para reconocer el trabajo autóctono y aumentar el PIB del territorio, que según el alcalde y como recoge el canal de TV Caracol, destacan el abandono y olvido que se expande sin control por las montañas del Cauca.
Fuente:Tv Caracol
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