Exceso de nitrógeno en las plantas. Cómo solucionarlo

Estos son los casos en los que tu planta le sobra nitrógeno

El nitrógeno es un nutriente esencial en la etapa de crecimiento de las plantas de cannabis. Pero, ¿qué ocurre cuando nuestras plantas se pasan de la raya con este nutriente esencial? ¿Cómo podemos detectarlo y, lo más importante, cómo solucionarlo? ¡Sigue leyendo!

¿Qué es el exceso de nitrógeno en las plantas de cannabis?

En anteriores post te hablamos de la carencia de nitrógeno. Esta vez nos centraremos en el caso opuesto, cuando nos pasamos de la ralla con este nutriente. El nitrógeno es como el amigo que siempre trae la pizza a la fiesta. Es esencial para el crecimiento y desarrollo de las plantas, pero como en toda buena fiesta, hay que saber cuándo parar. Cuando nuestras plantitas reciben demasiado nitrógeno, pueden volverse un poco adictas al crecimiento vegetativo. Es decir, se obsesionan con producir hojas y más hojas, pero se olvidan de las flores y los frutos. ¡Es como si estuvieran en una maratón de Netflix y no salieran de la fase de crecimiento!

Síntomas del exceso de nitrógeno en las plantas

Color verde intenso en las hojas

Las hojas inferiores de la planta comienzan a parecerse al Hulk. Ese verde oscuro más intenso es una señal de que hay demasiado nitrógeno. Poco a poco, ese verdor intenso se extiende por toda la planta, como si estuviera como un doping de clorofila.

Debilitamiento por exceso de nitrógeno

Los tallos y las hojas se vuelven un poco blandengues. Es como si las plantas hubieran estado haciendo un ejercicio extremo y ahora no pueden mantenerse en pie. Además, esta fragilidad las hace más susceptibles a los ataques de los insectos. ¡Necesitamos que se fortalezcan!

Crecimiento excesivo de Follaje

El nitrógeno es como el abono para las hojas. Aumenta la producción de clorofila y crea estructuras de hojas más grandes. Pero, ¿dónde quedaron las flores y los frutos? Las plantas se vuelven tan frondosas que parecen esconderse detrás de su propio follaje. ¡Menos hojas, más flores, por favor!

Quemaduras y concentración de sales

El exceso de nitrógeno puede causar quemaduras en las puntas de las hojas. Además, puede acumularse en el suelo generando bloqueos nutricionales. Las plantas no pueden deshacerse de tanto nitrógeno y eso puede afectar su salud general.

Retraso en el crecimiento de la raíz

Las raíces se sienten un poco perdidas en esta fiesta de nitrógeno. No crecen tan rápido como deberían, y eso afecta la absorción de otros nutrientes. Es como si estuvieran en una cola interminable en la tienda de nutrientes.

Contaminación de las aguas subterráneas

El nitrógeno en exceso puede filtrarse al agua subterránea y causar problemas ambientales. No queremos que nuestras plantas sean responsables de contaminar el agua de pozos o dañar el medioambiente.

¿Cómo eliminar el exceso de nitrógeno en las plantas?

Eliminar el exceso de nitrógeno no es una tarea rápida. No es fácil, pero con paciencia y algunos trucos, nuestras plantitas pueden volver a estar en forma. Aquí tienes algunas estrategias para combatir ese verde excesivo:

  1. Suspender el abonado: Como si estuviéramos en una dieta de nitrógeno, dejaremos de echar fertilizantes durante un tiempo. Las plantas necesitan un detox, así que les daremos un respiro.
  2. Lavado de raíces: Un pequeño spa para las raíces. Sacaremos la planta de su maceta, retiraremos la tierra suelta y le pondremos una nueva. Esto reducirá aún más la cantidad de nitrógeno en el sustrato. Después realizaremos un riego profundo solo con agua para arrastrar todos los posibles nutrientes que estén en el sustrato.
  3. Combate las plagas: Si ya han aparecido las plagas, las eliminaremos con algún insecticida específico o productos naturales como la tierra de diatomeas o el aceite de neem. Es como si les dijéramos a las plagas: “¡Aquí no hay buffet de nitrógeno para ustedes!”.

¿Qué ocasiona el exceso de nitrógeno en las plantas?

Si te estás preguntando a qué se debe el exceso de nitrógenos en tus plantas solo hay un motivo: el mal uso de los fertilizantes. A veces nos emocionamos demasiado con el abono y les damos a nuestras plantas más nitrógeno del que necesitan. Los envases de fertilizantes siempre llevan una etiqueta con instrucciones y no es por gusto. Un exceso de nitrógeno puede ser mortal para la planta y perjudicial para el medio ambiente. Si no lo absorbe la planta, acabará en la atmósfera.

Así que, queridos jardineros, recordemos que el nitrógeno es como un condimento: en la cantidad justa, es delicioso; en exceso, puede arruinar la comida. ¡Cuidemos nuestras plantas y mantengamos el equilibrio!

Si tenéis alguna duda o queréis aportar algo de información al artículo, podéis hacerlo más abajo en los comentarios.

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